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HOJA INFORMATIVA SOBRE TERREMOTOS


HOJA INFORMATIVA SOBRE TERREMOTOS


 
Los túneles Water Fix del Delta de California no eliminan los riesgos de terremotos al suministro de agua. El mítico riesgo de terremotos le sirve a los intereses de los que quieren exportar el aguaLos exportadores de agua distorsionan el riesgo de temblores para generar apoyo para los Túneles del Delta.
 
Fortalecer los muros de los diques es una solución más efectiva.
 
• Los californianos deberían trabajar juntos para construir un Delta más resistente a los sismos que protegerá las exportaciones de agua, otra infraestructura crítica, y salvar vidas – y todo esto a un costo menor que el CA Water Fix.

• Desarrollar suministros hidráulicos regionales brinda una fuente de agua más consistente. La mejor manera de evitar interrupciones causadas por los sismos es la de invertir en soluciones locales, incluyendo tecnología y medidas de conservación de agua, de optimizar la reutilización de aguas residuales y la recarga de aguas subterráneas, mientras se capta agua de lluvia, aguas residuales domésticas y se reparan las tuberías locales defectuosas. La limpieza de acuíferos locales y la creación de empleos locales para obtener agua localmente, es racional desde el punto de vista económico.

• En vez de hacer una inversión gigantesca en túneles lejanos, mejor reforcemos los diques del Delta y preparemos a todas las comunidades de California a que sean menos dependientes en agua importada.

 

MITO #1: Los Túneles del Delta protegerán el suministro de agua de California contra los temblores.
 
HECHO: Los sismos golpearían el existente sistema de transporte de agua en otras partes de California más duro de lo que golpearían al Delta. El riesgo sísmico para el Delta es mínimo. La Falla de Hayward está a 40 millas del centro del Delta. Pero el Proyecto de Agua del Estado (o SWP) y el Proyecto Federal del Valle Central (o CVP) atraviesa justo encima de zonas de fallas de alto riesgo, desde Coalinga hacia el sur hasta LA, incluyendo la Falla de San Andrés. Los canales de cemento en la parte sur del estado son más vulnerables a los sismos que los diques del Delta. Otras partes del Proyecto de Agua del Estado son igual o más vulnerables a los terremotos que el Delta como: el Acueducto California, situado sobre las Sierras Costeras– la falla del Valle Central; la Reserva de San Luis –reconocida por DWR y la Oficina de Recuperación por tener una “deficiencia sísmica”–, el crucero de la falla de San Andrés en Tehachapis, y muchos otros elementos de la red de distribución de agua en el Sur de California.
 
¿Tiene sentido económico gastar más de $50-60 mil millones para reforzar las primeras 30 millas del sistema de exportación de agua de 400 millas, cuando la amenaza sísmica es igual o mayor en otras partes del sistema? El costo astronómico de los Túneles del Delta amenaza la inversión en un sistema que sea más sólido y más resistente a desastres.
 
MITO #2: Los Túneles del Delta son necesarios para reparar un sistema vulnerable y  cuyo fracaso lanzaría al estado al caos, deprivando a 25 millones de californianos de agua potable por años y le costaría miles de millones de dólares a la economía estatal.
 
HECHO: Es totalmente engañoso sugerir que 25 millones de californianos dependen del agua traída desde el Delta para usos personales.  Una fracción del agua que se suministra a 25 millones de californianos puede que provenga del Delta, pero la mayoría de las agencias administradoras de agua en el estado tienen fuentes múltiples, y la estrategia más segura para todas las regiones es moverse hacia la autosuficiencia regional. En el evento de una inundación en el Delta, una buena parte de la Zona Este de la Bahía recibirá su agua del Río Mokelumne por medio de los acueductos del Delta que en su mayoría están enterrados, y SF recibirá su agua del Río Tuolumne via el Acueducto Hetch Hetchy. Según el Plan para la Sustentabilidad Económica de la Comisión de Protección del Delta (1/9/ 2012), la simulación de ingreso de salinidad y cálculo de riesgos en caso de inundación del DWR indicó que “el Delta se descarga más rápidamente de lo que se pensaba anteriormente, y que las exportaciones podrían restablecerse en un máximo de seis meses, pero más probablemente en un período más corto, incluso si varias islas se inundaran” (pág. 87, énfasis añadido).  Los estudios más recientes del DWR sugieren que incluso en el evento extremo de que ocurrieran rupturas en 50 diques y se inundaran 20 islas, probablemente se interrumpirían las exportaciones de agua por varios meses. El Distrito Metropolitano de Agua hizo un reporte en el 2004 ante la Legislatura de California, Imágenes del Pasado; Retratos de una Nueva Realidad:  Logros en Conservación, Reciclaje y Recarga de Acuíferos, donde se afirma que el Lago Diamond Valley del Condado de Riverside “contiene suministros de agua de emergencia para el Sur de California en caso de que ocurra una interrupción mayor al sistema debido a sismos o cualquier otro evento no planeado” (pág. 27).
 
MITO #3: Los diques del Delta sufrirían averías catastróficas en el evento de un terremoto.
 
HECHO: La mayoría de los diques está en buen estado; otros pueden reclasificarse a estar en buen estado, y ninguno de ellos ha fallado en un terremoto. Para mayores detalles, vea el Reporte de Sustentabilidad Económica de la Comisión de Protección del Delta. USGS pidió una disculpa formal por exagerar los daños sísmicos en el Delta.
 
MITO #4: Los Túneles del Delta eliminarán el riesgo de temblores para los habitantes y la economía del Delta.
 
HECHO:  Los Túneles del Delta no examinan el riesgo sísmico al Delta. California Water Fix no protegerá al Delta, y no hace nada para pagar la mayoría de los costos de un terremoto, ni tampoco aumenta la seguridad pública. El Plan de Sustentabilidad Económica para el Delta de la Comisión de Protección del Delta demuestra que un 80% de los costos y 100% de pérdida de la vida en un sismo hipotético ocurrirían en el Delta. La infraestructura regional con valor de miles de millones de dólares (caminos, vías ferroviarias, líneas de transmisión eléctrica y de gas) también estaría en riesgo.  Se necesitarían de $2 mil a $4 mil millones adicionales para proteger al Delta y su gente y su infrastructura en caso de un terremoto. El Estado dice estar preocupado por un temblor en el Delta, sin embargo inexplicablemente sigue enfocado no en reforzar las defensas contra los terremotos en el Delta, sino en construir los Túneles del Delta para “proteger” el agua a exportar.  El Estado se ha olvidado que 4 millones de personas viven en los cinco condados cerca del Delta y que necesitan ser protegidos en caso de una inundación catastrófica.
 
MITO #5:  Los Túneles del Delta garantizarán el suministro de agua para exportación,  vital para proteger la economía de California.
 
HECHO: Garantizar una manera segura de llevar agua a los hogares y negocios de California significa arreglar redes LOCALES de agua primero, no la construcción de otro túnel que no podemos pagar. Si ocurre un terremoto, las tuberías de agua locales están en peligro. Si la tubería se revienta, las calles locales se inundarán.
 
MITO #6: Los Túneles del Delta resolverán la amenaza que representa el aumento del nivel del mar y la entrada de agua salada a las reservas de agua en California.
 
HECHO:  El Delta se encuentra en una buena posición para poder lidiar con el aumento del nivel del mar– los diques pueden levantarse varias pulgadas cada año. Los puertos interiores puede que se vuelvan más importantes y necesiten más protección con el aumento del nivel del mar.
 
Sin embargo, el ingreso de agua salada podría empeorar por exportaciones excesivas de agua, lo cual los Túneles del Delta facilitarían. El trabajo de USGS (por James E. Cloern y Alan D. Jassby, Agentes de Cambio en Ecosistemas Estuarino-Costeros: Descubrimientos de Cuatro Décadas de Estudio de la Bahía de San Francisco) explora el impacto de cantidades reducidas de agua y tiempos alternantes sobre los caudales de agua dulce a partir de 1956.  Al examinar el período de 1956 al 2003, notaron que “El efecto Delta [ingreso de agua salada]. . . aumentó con el paso del tiempo, a causa de la salida de flujos hacia la Bahía de San Francisco Bay. La tendencia del efecto Delta se debe a [mayores] exportaciones de agua del Delta …”
 
Los Túneles del Delta causarían daños económicos devastadores en la actividad pesquera de California. La Pesca de la Zona de la Bahía y del Norte de California que dependen de las condiciones en el Estuario del Delta de la Bahía han sufrido menoscabo económico debido a la falta de agua dulce. Por ejemplo, los cierres a la pesca comercial de salmón en el 2008 y 2009 representó una pérdida multimillonaria que ha sido frecuentemente ignorada por aquéllos que alegan que la gigantesca agroindustria del lado oeste del Valle de San Joaquín necesita más agua. Los intereses agrícolas que se benefician del agua exportada, representan un 0.3% del GDP de California.
 
La clave para el suministro y seguridad del agua se encuentra en desarrollar fuentes locales cuyos costos de energía y del agua serían los menos caros.  Agua importada desde el Delta a cientos de millas de distancia está repleta de problemas y costos aparte de los riesgos causados por los sismos.